En su estancia en la Selva Lacandona, el antropólogo norteamericano Carlos Frey descubrió al mundo el extraordinario sitio que le mostraron los lacandones: las ruinas de Bonampak.
En 1949, con el apoyo de Diego Rivera y David Alfaro Siqueiros, organizó una expedición en la cual participó el artista plástico Raúl Anguiano.
“Este viaje marca a Anguiano por su encuentro con la mujer lacandona, misma que estuvo en su obra.
Rememorar este viaje en el contexto de las actividades del centenario del nacimiento de Anguiano permite entender la importancia de esta experiencia para el artista, pues mucha razón asiste al poeta Jaime Labastida cuando afirma que “Raúl Anguiano nació en Chiapas porque esa expedición fue un parteaguas en su pintura, del cual nació un estilo nuevo y un contacto con ese México misterioso y olvidado”
Exposición en el Museo de Arte Raúl Anguiano (MURA)
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