domingo, 31 de agosto de 2025

Poemario: "Soñando en vela"

 




Soñando en vela

Tu piel me sabe almíbar 
de los besos que te doy
cuando poso mis labios
por tu boca acaramelada.

Todas las noches las paso
en vela pensando en ti
 por tenerte en mis sueños 
de suavidad acariciadora.

 Y te veo entre la neblina 
 de la oscuridad de mi cuarto
y siento la tristeza oscura
que todo mi ser inunda.

Y el deseo de palparte 
 y con la humildad 
 de este ser tuyo tan adorado
 tenerte entre mis brazos.

Noche tras noche 
soñando día tras día 
 yo sigo esperando 
tu compañía.

 Que podamos vivir 
 los dos muy juntitos 
 lo soñado y no soñado
en lo eterno de la vida.

Expirar mi último aliento 
 para sentir ese placer 
 de tanta felicidad soñada 
 entre el calor de tus brazos
amor del alma mía.




Montt, 31, agosto, 2025
Romero Salgado Pacha



Poemario: "Los ojos de mi amada"

 



Los ojos de mi amada

Raya el sol de media mañana 
 que el camino va señalando
 y una alfombra de oro fino 
para los pies de mi amada
que va caminando.

Para que sus pies no sufran
 de las espinas del camino
a la mujer que yo quiero
que alivia mis quebrantos.

¡Qué fervor! Ella tan ufana
con sus andares delicados 
al pasar desgrana delirios
todos quedan deslumbrados.

 Al ver pasar a esta reina 
por esa belleza que deslumbra 
 con ese destello en sus ojos 
 y ese fervor en los labios.

Deliciosos ojos que la ven
 dos lágrimas ruedan 
 por la belleza de sus ojos 
 y se pierden resbalando.

 Por el dibujo que lo forman 
el rictus de sus labios rojos.




Montt, 31, agosto, 2025
Romero Salgado Pacha 




Poemario: "Dentro de mí"

 


Dentro de mí

Por la noche vi huyendo 
la luna para esconderse 
y en la negrura mis ojos vieron  
 al ver tu imagen divina.

Era clara y difusa 
 junto al perfil de mi alma 
y caí en ese estado de sopor 
 de estrellas y arco iris.
 
La claridad de mi mente
 que iluminaban el horizonte
escuchaba con dulzura
 unas dulces melodías.

Era un coro celestial 
que circundaba en derredor 
 en la que el perfil de tu imagen
 quedaba suspendida con esplendor.

Creía estar soñando 
 pero no eran sueños 
 los que me rondaban 
 y vi esa cara tuya de mujer 
 de niña en estado de gracia.

Era como fuego abrasador 
 lo que a mis venas empujaban, 
 mi corazón daba latidos 
   que a los tuyos los miraba.

 Que con tierna dulzura
y mis ojos de par en par
en tus labios con los míos
yo  los besaba.




Montt, 31, agosto, 2025
Romero Salgado Pacha



Poemario: "Azul de cielo"

 


Azul del cielo

Creí transportado a los cielos 
que los ángeles me llevaban 
quise alcanzarte y no pude 
porque algo me atraía 
 y al mismo tiempo empujaba.

Eras la musa que guiabas 
 mis sueños que se perdían 
 era un sueño de amor divino 
 que envolvía entre nubes 
 y se entregaba a mi alma.

Sentí el candor de tu aliento 
 que oprimía mi pecho 
 no sabía bien qué era 
 era ese amor purificado 
 que constantemente su paso 
 por el camino no cesaba.

La luz se fue difuminando 
lentamente se marchaba 
 como el sol cuando se oculta 
 como el candil cuando se apaga.

Pero algo quedó muy dentro de mí 
de todo aquello que soñaba 
 eras tú que poco a poco 
en mi corazón te adentraba.




Montt, 31, agosto, 2024
Romero Salgado Pacha



Poemario: "La vida se cuela"

 


La vida se cuela

¿Por qué la vida se nos cuela 
y el tiempo pasa 
 como el viento se nos vuela
 sin esperar a que volvamos 
 ni suplicando siquiera 
 una mínima espera?

El tiempo se detiene 
cuando no te das cuenta 
 pero va marcando 
 esa espera que no vemos 
 porque se esfuma 
 en la atmósfera.

El tiempo sigue detenido 
 marcando la espera 
 que siempre ha de volver 
 es mejor dejarlo correr 
 en su largo caminar 
a toda vela.

Y nosotros estáticos 
con las manos quietas 
 quedaremos mirando 
 con la mirada prieta 
esperándote algún día
 hasta que tú vuelvas.




Montt, 31, agosto, 2025
Romero Salgado Pacha



Poemario: "Luces en el pasado"

 




Luces en el pasado 

Tú y yo nos miramos 
 cada tarde que cae 
 cada noche que llega 
 dejándonos en penumbras
las infringidas heridas.

 Algunas mañanas 
 y en los mediodías
 es ese cordón umbilical
que tanto soñábamos 
y nos uní con caricias.

Es esa pasión que nos une 
de querencias en el tiempo
de ese tiempo pasado 
 de encuentros ausentes
de amor y de querencias. 

Siquiera nos habláramos 
momentos que no existen
porque no nos sentimos
nos falta la presencia
del uno al otro a su lado.

 Siquiera nos vemos
 pero el corazón late 
del alma que late
bajo un espíritu 
y una herida abierta.

Cuando falta el amor 
cuando se ahuyenta
 ese constante cariño
se aparta de los dos
    y la esperanza muerta.

 Solo estaba en el corazón 
 tiernamente guardado
pero siempre esperando
para resucitar el tiempo
hasta que un día despierta.

Y yo me sigo preguntando 
 cuando estas líneas escribo
y sin acuse de recibo 
 ¿Cómo pudo ser el tiempo
que oculto estuviera?
 
 Que en ese tiempo 
 yo no la hablara  
y no hubiera nada 
que nos dijéramos
 entre los dos.

No hubo nada de nada 
 solo recuerdos lejanos 
 de esa niñez guardada
de sueños que quedaron
para sentir ese flechazo. 

Y aparece el recuerdo
 guardado en la mente 
ahí estaba escondida
la bien amada mía
prendida con alfileres.

En un rincón del corazón 
 durante tanto tiempo 
 tanto, tanto, tanto tiempo
que tan lejano parece
que ya sangraba.

¿Dónde se produjo la herida 
 tan grande, dónde esa llaga,
 hasta entonces oculta
sin verla no tocarla
y ahora resucitada?

Por eso mi corazón 
 late con felicidad 
 sabiendo que el amor 
vuelve a unirse 
y junto al tuyo está.

Un amor eterno
 que siempre soñamos 
en esa lejanía creía
pero que tan cerca 
 para después regresar.

Solo con el hecho 
 de pequeños detalles
 solo que me mires
y que me acaricies,
y que me hables.

Comprendas mis sentimientos 
viendo como mi amor hacía ti 
 volando en pos del viento 
un tiempo sin parar
 detrás del tuyo se va. 

Y mi corazón late
  cuando te abrazo
y te acaricio 
 y me falte el aliento
si quiero besarte.




Montt, 31, agosto, 2025
Romero Salgado Pacha




jueves, 21 de agosto de 2025

Poemario: "El fulgor de tu mirada"

 


El fulgor de tu mirada

Anoche estuve durmiendo 
bajo el fulgor de tu mirada 
con los ojos humedecidos 
 de ensoñaciones pasadas.

Con los ojos entornados 
 desde la lejana distancia 
 pude ver tu imagen 
 de una pureza inmaculada.

Y soñé dormido y despierto
que a tu cuerpo me abrazaba 
 fundiéndose a ti con ese calor
 que tu cuerpo tú me dabas.

Caí en un sueño 
 muy profundo 
¡qué dulce sueño 
 la de esa noche!
 
En tus brazos aprisionado
me encontré prisionero
y la mirada mía en la tuya
se me perdía mí alma.

  Pero un soplo de viento 
 llegado de no sé donde 
 vino a despertarnos
sin saber porque razón.

Fue quizás ese otoño 
 entrando por la ventana 
 el que sin darnos cuenta 
  nos despertó la mañana.

Y soñé con la mirada tuya 
 que en la mía se posaba 
sintiendo como mi corazón 
 tú al mío la atrapabas.

 Fue cuando comprendí 
 que quedaba aprisionado
con el calor de tu cuerpo
 muy dentro de tu alma.

¡Qué delirio el que sentí! 
Me recorrió por las venas 
 sin saber si eras tú 
o mi mente que soñaba.

 Y comprendí al instante 
 qué llegabas ya sin aliento 
 viendo que extendía tus brazos 
 en señal que me necesitabas.

Uní mi cuerpo al tuyo 
y sentí latir tu corazón
que muy junto al mío
 tú toda mía te notaba.

 Quedaste dentro de mí 
 escuchando que me decías 
 con mi cabeza en tus senos
 tú espíritu al mío le llamaba.

No pude menos que sonreír
 y sentir como en un instante 
 entre quejidos de placer tuyos 
mi cuerpo temblaba.

Con esos quejidos tuyos 
 noté como mi cuerpo 
pegado a tu cuerpo 
de esa pasión sudaban.

Y con una dulce melodía 
 de los trinos de las aves 
 hizo que los dos enamorados 
  esa melodía les embargaran.

Así cayeron los dos 
en un sueño profundo
con los cuerpos ardientes 
 envueltos entre sábanas.




Montt, 20, agosto, 2025
Romero Salgado Pacha





martes, 19 de agosto de 2025

Libros de ocasión: "El retrato de Dorian Gray" (Novela)

 Autor:
Oscar Wilde

"El retrato de Dorian Gray" es una novela del escritor irlandés Oscar Wilde, publicada por primera vez en 1890. Es considerada una obra clásica de la literatura occidental y un exponente del esteticismo y la decadencia finisecular. La novela narra la historia de Dorian Gray, un joven extremadamente bello que, al ver su retrato, desea que este envejezca en su lugar, mientras él conserva su juventud eterna. 

Barcelona, 1999
Ed. Unidad Editorial (El Mundo)
255 páginas  

Colección: "Millenium", 10
(Las 100 joyas del Milenio)

Prólogo: Luis Antonio de Villena
Traducción: José Luis López Muñoz

Tapa dura
21x12,5 cms.

Ejemplar adquirido con el diario "El Mundo", en 1999
Sin índice bibliográfico.
100p.

(BG-6623)


El autor:
Oscar Fingal O'Flahertie Wills Wilde (Dublín,​ entonces perteneciente al Reino Unido,​16 de octubre de 1854-París, 30 de noviembre de 1900)

Conocido como Oscar Wilde, fue un escritor, poeta y dramaturgo británico de origen irlandés. Wilde es considerado uno de los dramaturgos más destacados del Londres victoriano tardío. Fue una celebridad de la época debido a su aguzado ingenio. Es recordado por sus epigramas, sus cuentos, obras de teatro, su única novela, El retrato de Dorian Gray, y la tragedia de su encarcelamiento, seguida de una muerte prematura.






Poemario: " Tus ojos me llaman"



 Tus ojos me llaman

Esa hermosura tuya
que se plasma en tu cara
que cada día que pasa
siempre te encuentro
mucho más guapa.

Que guapa en el perfil,
que lastima no poderte tocar
que solo te pueda contemplar 
desde esta lejana distancia 
que siempre nos separa.

y no pueda capturar la imagen
de esa pureza inmaculada.
 
"Solo es una foto
 que ha salido bien"
me dices tú
con esa modestia 
que te halaga.

Sales siempre guapa 
en todas las que te hagas 
porque tú lo eres, 
con esos ojos tuyos 
 iluminando esperanzas.

Son dos rayos de sol 
 brillando la primavera,  
son como dos lucecitas
y se cuelan en el corazón 
de quien los mira.
 
Dos luceros del alba 
que dan alegría a mi vida
cuando abro la ventana, 
cuando miro a las estrellas 
desde tan larga distancia.

 Los que me infunden 
tanto amor a mi ser
que de tanto mirarlos
se funden con los míos
y me arrebatan el alma. 

Esos ojos tan bonitos
esos que se me llevan
cuando al mirarlos 
siempre conservan
esa alegría pasada.

Ese cariño que guardan
ese amor que los empañan
son esos ojos negros
que no dejo de mirarlos
los que me roban el alma.

Ojos llenos de dulzura
que me hechizan
 cuando tengo pena 
y tristeza dentro de mi 
que me arrebatan.

Esos ojos que me llaman
y me sueñan las madrugadas
 y me dan esa alegría 
esa alegría que nos miman
y que a los míos les falta...

¿Quieres que siga, 
que infunda la pasión 
que corre por tus venas 
y que yo al mirarlos
a mi corazón atenaza?

 ¡Qué loor, qué divinidad 
hay en esos ojos tuyos
esos ojos que de mí
es imposible apartarlos
cuando me llaman.

 Porque si lo hago
 se me va con ellos la vida, 
porque siempre que los miro
se van los míos tras ellos 
y a los míos arrebatan.

Y a cada momento 
 están robando mi ser
para llevarme contigo
hasta mucho más allá 
de las galaxias.

Hasta perderse lejos
en una fugaz huida
de esa eternidad 
perdida en el horizonte
tan lejana...




Montt, 11, agosto, 2025
Romero Salgado Pacha



jueves, 14 de agosto de 2025

Poemario: "Del llanto"

 


Del llanto

Y dejaré correr el llanto
de tristezas que apenan
en ese llanto de desconsuelo
ese llanto que nos quema.

y moriré con esa tristeza
de ese llanto abrasador 
 y mi cabeza entre tus senos
para quitarme las penas
Yo te estaré esperando 
en una nube de algodón
 la más cerca que haya 
en el cielo subida.

Para subir juntos 
 con ese amor eterno
con ese amor que 
el camino nos lleva.

No es tiempo de llorar 
ni de penas ni de tristezas 
 es tiempo de alegrarse
  y quitar las penas.

 Es lo que mejor tenemos
es la eterna juventud
la que siempre soñamos
que al final nos queda. 

 Mírame en el espejo
mírame con insistencia 
este estado de embriaguez
que en tu cara llevas.

Es una pena que llevo 
y que me embarga 
 de estos sentimientos 
 que nos quedan.




Montt, 14, agosto, 2025
Romero Salgado Pacha



Poemario: "En cada aliento tuyo"

 


En cada aliento tuyo

Abre tu pecho y acógeme 
que llega mi espíritu 
escondido en una nube
 para que acojas mi alma. 

Abrázame fuerte 
muy fuerte contra tu pecho 
 para que el amor que te tengo 
 no se escape ni se vaya.

Yo entraré en tu cuerpo 
 en cada suspiro que das 
y que al respirar soñando 
 de tu boca se te escapan. 

 En cada latir de tu pecho 
en cada abrazo 
en cada caricia mía 
y en cada aliento de tu alma.

Soñaré contigo esta noche
y también lo haré mañana
todos los días del año
te soñaré, mi amada.

Será para mí la dicha
más dulce y soñada
la que me hará muy feliz
mi querida amada.




Montt, 14, agosto, 2025
Romero Salgado Pacha




Poemario: "Escucha el viento"


Escucha el viento

Siento tus manos 
cómo te tiemblan 
con las mías al rozarte
 entrelazadas.
 
 Miro tus lindos ojos 
cuando parpadean 
cuando con los míos
sienten mí mirada. 

Escucha el leve susurro 
cuando llega a ti
es mi voz que te habla 
la que te llama.

Es ese quedo arrullo 
que del jilguero clama
 y que te lleva el viento
por tu ventana.
 
Ese viento que silba
las noches de tristeza
cuando ahora respiras
y en la cama sueñas.

Escucha el viento 
cuando pasa silbando 
cuando duermes 
 y estás soñando. 

 Son los tristes latidos
 de mí sufrido corazón 
 que con el viento 
 a ti te han llevado.




Montt, 14, agosto, 2025
Romero Salgado Pacha



miércoles, 13 de agosto de 2025

Libros de ocasión: "El cementerio marino" (Poesía)

Autor:
Paul Valéry

No hay muchos poemas, en la poesía universal, que despierten el interés que provocó El cementerio marino, de Paul Valéry, desde su publicación inicial en la Nouvelle Revue Française, el 1 de junio de 1920. 

Una oda de veinticuatro sextinas, que ha tenido tantas interpretaciones como la Biblia, como denominaba al poema Max Aub. En El Sur (octubre de 1945), aseguraba Jorge Luis Borges que a pesar de que Rilke, Eliot y Yeats hubieran escrito “versos más memorables que los de Valéry… detrás de la obra de esos eminentes artífices no hay una personalidad comparable a la de Valéry”.


Calmo techo surcado de palomas,
palpita entre los pinos y las tumbas;
mediodía puntual arma sus fuegos
¡El mar, el mar siempre recomenzado!
¡Qué regalo después de un pensamiento
ver moroso la calma de los dioses!

¡Qué obra pura consume de relámpagos
vario diamante de invisible espuma,
y cuánta paz parece concebirse!
Cuando sobre el abismo un sol reposa,
trabajos puros de una eterna causa,
el Tiempo riela y es Sueño la ciencia.

Tesoro estable, templo de Minerva,
quietud masiva y visible reserva;
agua parpadeante, Ojo que en ti guardas
tanto sueño bajo un velo de llamas,
¡silencio mío!… ¡Edificio en el alma,
mas lleno de mil tejas de oro. Techo!

Templo del Tiempo, que un suspiro cifra,
subo a ese punto puro y me acostumbro
de mi mirar marino todo envuelto;
tal a los dioses mi suprema ofrenda,
el destellar sereno va sembrando
soberano desdén sobre la altura.

Como en deleite el fruto se deslíe,
como en delicia truécase su ausencia
en una boca en que su forma muere,
mi futura humareda aquí yo sorbo,
y al alma consumida el cielo canta
la mudanza en rumor de las orillas.

(...)


Barcelona, 1999
Ed. Unidad Editorial (El Mundo)
93 páginas + 1 hoja

Colección: "Millenium", 84
(Las 100 joyas del Milenio)

Prólogo: Víctor García de la Concha
Traducción: Carlos D. Dampierre

Tapa dura
21x12,5 cms.

Ejemplar adquirido con el diario "El Mundo", en 1999
Sin índice bibliográfico.
100p.


(BG-6626)

El autor:
Ambroise-Paul-Toussaint-Jules Valéry (Sète, 30 de octubre de 1871-París, 20 de julio de 1945) 

Fue un escritor, poeta, ensayista y filósofo francés. Como poeta es el principal representante de la llamada poesía pura; como prosista y pensador (él se consideraba antifilósofo), sus textos han sido comentados por muchos autores, desde Theodor Adorno y Octavio Paz hasta Jacques Derrida.



Libros de ocasión: "El señor presidente" (Novela)

  Autor:
Miguel Ángel Asturias

La descripción y la denuncia de las tiranías latinoamericanas han servido de trasfondo argumental a novelas de gran calidad literaria. "El Señor Presidente", inspirada en la figura del dictador guatemalteco Manuel Estrada Cabrera, elevó a su máxima capacidad expresiva esa línea narrativa y lanzó a la fama a Miguel Ángel Asturias (1899-1974), Premio Nobel de Literatura en 1967. 

El relato constituye un descenso a los infiernos a través de la reconstrucción de una atmósfera de pesadilla, forjada por el ejercicio ilícito del poder y por la omnipresencia de la tortura y el miedo. La visión esperpéntica de la realidad y el lirismo descarnado logran la transfiguración de una situación histórica concreta en una realidad literaria autónoma. Otras obras de Miguel Ángel Asturias en esta colección: "Hombres de maíz", "Leyendas de Guatemala" y "Maladrón".

Barcelona, 1999
Ed. Unidad Editorial (El Mundo)
255 páginas  

Colección: "Millenium", 22
(Las 100 joyas del Milenio)

Prólogo: Gonzalo Santonja


Tapa dura
21x12,5 cms.

Ejemplar adquirido con el diario "El Mundo", en 1999
Sin índice bibliográfico.
100p.

(BG-6625)

El autor:
Miguel Ángel Asturias (Guatemala, 1899-Madrid, 1974) 

Fue abogado, diplomático y escritor, y aunque practicó todos los géneros, fue su narrativa fundacional la que lo llevó al reconocimiento internacional y a la consecución del Premio Nobel en 1967. 






Poemario: "Un poema"

 



Un poema 


Dulce criatura, 
 un nombre tan bonito
  que produce bienestar 
nada más pronunciarlo.

Solo con tres sílabas 
iluminan tu ser.
te recuerdo de ahora 
y de siempre.

Cuando en el pueblo.
Cuando alguna vez 
nos encontrábamos 
tú pronunciabas mi nombre
y yo quedaba embobado.

Yo no te reconocía
querida mía, mi encanto
 tú siempre me estuviste 
 en la punta de tus labios.

Aquellos recuerdos
 cuando de pequeña 
que no podía tener
más de seis años.

 Del balcón del piso 
desde lo más alto
todo para mí era
de lo más raro.

 Tú señalabas uno a uno
el nombre de todos 
aún con la dificultad
una amalgama de coches 
que iban pasando.

 Diminutos desde esa altura 
a velocidad iban circulando.
¡Qué niña más linda 
y tan pequeña! Decía yo.
 
En mi estado de asombro
volvía a decir obcecado. 
 Se sabe todas las marcas 
de lo coches circulando.

¡Qué memoria guarda 
ella tan chiquita 
 y yo tan ignorante 
y tan embobado.

Ahora somos ya adultos 
ahora ella sigue soñando
con cosas de mayores 
y con historias de antaño.

 También de la vida 
 y del mundo entero
que quiere comérselo 
con los ojos.

De ese tiempo lejano,
adueñándose de nosotros
cuando sueña enamorada 
cuando piensa soñando.

 De cuando el tiempo corre
y nos arrastra a su lado.

Pero, sí, volveremos 
a donde nos vimos 
a esa ciudad grande
donde quedan sueños 
guardados. 

Para recordarte de cerca 
para ser lo que éramos, 
 para yo verte de niña 
 y volver a soñar 
lo ya soñado.

Revivir viejas historias 
de gente y de cosas 
 para rememorar lo pasado.
 
 Y seguir con esa nostalgia 
recordar cómo entonces
como un niño soñando.

Ahora te tengo cerca
y te tengo dentro de mí,
muy dentro de mi alma
como dueña y señora.

Como una reliquia
como joya que guardo
como un sueño
que sigo soñando.

De esos recuerdos,
Camino de la ermita 
/ Arroyo Horcajuelo,
 seis de septiembre, de 2021
de hace ya años.





Montt, 12, agosto, 2025
Romero Salgado Pacha




domingo, 10 de agosto de 2025

Libros de ocasión: "El jugador" (Novela)

  Autor:
Fiódor Dostoievski

Novela de indudable trasfondo autobiográfico, El jugador (1866) refleja los dos grandes impulsos -el juego y la pasión amorosa- que dominaron la vida de Fiódor Dostoyevski (1821-1881). En medio de una galería de personajes desarraigados y trashumantes que deambulan por la ciudad-balneario de Wiesbaden (el «Roulettenburg» de la ficción), la patética figura de Aleksei Ivanovich personifica el goce y la angustia del tipo humano que acaba por canalizar toda su capacidad de protesta en la pasión por el juego como vía de acceso, mediante el dolor y el envilecimiento, a una libertad vorazmente deseada.

Novela de indudable trasfondo autobiográfico, refleja los dos grandes impulsos -el juego y la pasión amorosa- que dominaron la vida de Fiódor Dostoyevski (1821-1881). En medio de una galería de personajes desarraigados y trashumantes que deambulan por la ciudad-balneario de Wiesbaden (el «Roulettenburg» de la ficción), la patética figura de Aleksei Ivanovich personifica el goce y la angustia del tipo humano que acaba por canalizar toda su capacidad de protesta en la pasión por el juego como vía de acceso, mediante el dolor y el envilecimiento, a una libertad vorazmente deseada.

Barcelona, 1999
Ed. Unidad Editorial (El Mundo)
199 páginas  

Colección: "Millenium", 16
(Las 100 joyas del Milenio)

Prólogo: Jesús Ferrero
Traducción: Victoriano Imbert

Tapa dura
21x12,5 cms.

Ejemplar adquirido con el diario "El Mundo", en 1999
Sin índice bibliográfico.
100p.

(BG-6624)

El autor:
Fiódor Mijáilovich Dostoyevski (Moscú, 11 de noviembre de 1821-San Petersburgo, 9 de febrero de 1881) 

Fue uno de los principales escritores del Imperio ruso, cuya literatura explora la psicología humana en el complejo contexto político, social y espiritual de la sociedad rusa de la segunda mitad del siglo XIX. Las obras literarias de Dostoyevski abordan diversos temas filosóficos y religiosos. Entre sus novelas más aclamadas se encuentran Crimen y castigo (1866), El idiota (1869), Los demonios (1872), El adolescente (1875) y Los hermanos Karamázov (1880). Su novela corta de 1864, Memorias del subsuelo, se considera una de las primeras obras de la literatura existencialista.




Poemario: "Poema espontáneo"


 
Poema espontaneo

¿Te está gustando?
te pregunto.

"Ahora te salen más seguidos
ayer uno y hoy otro".

Porque hablamos,
ahora te admiro
y siento tu retrato
cuando te miro.

Porque ahora mismo 
me estás inspirando
 ahora sueño contigo
y me duermo soñando
en tu regazo.

Porque ahora
 soy más feliz 
desde el tiempo, 
desde cuando nos
 hablábamos.

Ahora quizás puedan 
salir uno o mil
poemas dedicados.

"Hasta mañana escribiendo 
tienes palabras para todo".

Pero yo sé que el de ayer 
era más guapo.




Calvario, 5, agosto, 2025
Romero Salgado Pacha


5/8/25, 0:10 - Alfonso Caballero: Vale, cuando vuelvas

Poemario: "Los sueños"

 


Los sueños


"Buenas noches"
me dices tú entre sueños
tras habértelo dicho yo
¿No dices que no tienes?
pues nos iremos a soñar
ese sueño tan eterno.

 Yo aun y con sueño 
no sé si escribirte 
cuatro versos 
y dos décimas
 para irme a la cama 
tan contento.

Para que sientas 
como el placer 
de mis versos 
te elevarán al cielo.

Para que entre línea 
y línea sueñe contigo 
porque si no sueño ahora 
después volver a soñar
 se hará tarde y te olvido.

Y ahora los sueños 
cuando son tan bonitos
prenderán en el corazón
y subirán al firmamento.

Por eso esta noche
 yo te deseo desde aquí
los mejores sueños 
que hayas tenido nunca, 
y yo me quedaré pensando
 en esos mismos sueños.

Que duermas feliz
con sueños y sin ellos
 porque a mí 
se me cierran los ojos
 y ya no te veo.




Calvario, 5, agosto, 2025
Romero Salgado Pacha



martes, 5 de agosto de 2025

Poemario: "Ese vestido"

 

Ese vestido

 Con ese vestido
que tú llevas
tan elegante,
y esa sonrisa 
tan hermosa.

Con ese aire 
de princesa 
que vale más 
que una reina.

¿Dónde la hermosura
que no veo ninguna 
solo cuando tú pasas
tu imagen deslumbra?

La única que destacas
la más espléndida, 
la más guapa 
y la más dichosa 
entre todas.

Mis ojos cuando te ven 
no saben que decir, 
mis ojos cuando te ven 
se transforman.

Yo quisiera mirarme 
mis ojos en los tuyos 
para hacerte sentir 
la más dichosa.

Y yo sentirme 
también dichoso 
con esos ojos tuyos
que al mirarme 
me miman.




Calvario, 4, agosto, 2025
Romero Salgado Pacha



Poemario: "El tiempo que yo espero"

 


El tiempo que yo espero 

Mira este tiempo
lo hermoso que es
que cuando te veo 
de tarde en tarde
yo no te encuentro.

 Mis besos te buscan 
y parecen perderse
 en ese largo tiempo 
que yo espero.

 Cuando el tiempo 
que está pasando
 pero no te veo
 yo me entretengo 
en mi embeleso.

¿Porque esa tardanza 
en que tú regreses
y volver con el tiempo? 

El tiempo pasa
el que te debe traer
y que es el único 
que ha de unirnos
de nuevo.

¿Porque la distancia 
nos aleja más y más 
y se hace más insistente 
esa distancia del tiempo?

 ¿Porque no ha venir 
 y has de acercarte 
con el tiempo al igual
 que la imagen tuya 
me llega al momento?

Y es que yo quisiera
 tenerte en mi corazón
además de tu retrato, 
en carne y hueso.

¿Porque no has de venir 
alguna vez tan ligera 
como el viento que corre,
que te traiga el mismo 
para ahorrar el tiempo?

Para yo verte de cerca 
que mis ojos de no verte 
se me están quedando 
muertos.

Y mis labios 
de no besarte 
se van quedando 
también secos.

Y dejo de sentir 
en los abrazos míos
el calor de tu cuerpo.

Te estoy esperando 
siempre, siempre
con solo el deseo
 para que tú tardes 
poco tiempo.




Calvario, 4, agosto, 2025
Romero Salgado Pacha



Poemario: "Caminando por la vida"

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