Poemario: "Luces en el pasado"

 

Luces en el pasado 

Tú y yo nos miramos 

 cada tarde que cae 

 cada noche que llega 

 dejándonos en penumbras

las infringidas heridas.

 Algunas mañanas 

 y en los mediodías

 es ese cordón umbilical

que tanto soñábamos 

y nos uní con caricias.

Es esa pasión que nos une 

de querencias en el tiempo

de ese tiempo pasado 

 de encuentros ausentes

de amor y de querencias. 

Siquiera nos habláramos 

momentos que no existen

porque no nos sentimos

nos falta la presencia

del uno al otro a su lado.

 Siquiera nos vemos

 pero el corazón late 

del alma que late

bajo un espíritu 

y una herida abierta.

Cuando falta el amor 

cuando se ahuyenta

 ese constante cariño

se aparta de los dos

    y la esperanza muerta.

 Solo estaba en el corazón 

 tiernamente guardado

pero siempre esperando

para resucitar el tiempo

hasta que un día despierta.

Y yo me sigo preguntando 

 cuando estas líneas escribo

y sin acuse de recibo 

 ¿Cómo pudo ser el tiempo

que oculto estuviera?

 

 Que en ese tiempo 

 yo no la hablara  

y no hubiera nada 

que nos dijéramos

 entre los dos.

No hubo nada de nada 

 solo recuerdos lejanos 

 de esa niñez guardada

de sueños que quedaron

para sentir ese flechazo. 

Y aparece el recuerdo

 guardado en la mente 

ahí estaba escondida

la bien amada mía

prendida con alfileres.

En un rincón del corazón 

 durante tanto tiempo 

 tanto, tanto, tanto tiempo

que tan lejano parece

que ya sangraba.

¿Dónde se produjo la herida 

 tan grande, dónde esa llaga,

 hasta entonces oculta

sin verla no tocarla

y ahora resucitada?

Por eso mi corazón 

 late con felicidad 

 sabiendo que el amor 

vuelve a unirse 

y junto al tuyo está.

Un amor eterno

 que siempre soñamos 

en esa lejanía creía

pero que tan cerca 

 para después regresar.

Solo con el hecho 

 de pequeños detalles

 solo que me mires

y que me acaricies,

y que me hables.

Comprendas mis sentimientos 

viendo como mi amor hacía ti 

 volando en pos del viento 

un tiempo sin parar

 detrás del tuyo se va. 

Y mi corazón late

  cuando te abrazo

y te acaricio 

 y me falte el aliento

si quiero besarte.

Montt, 31, agosto, 2025

Romero Salgado Pacha