Dame tu ser
Dame tu mano
para que yo sienta
el alivio y el consuelo
de tu corazón
con el mío maltrecho.
Dame tu boca
para yo besar tus labios
que los míos lloran
por los tuyos de amor
que sedientos
se están apagando.
Dame tus ojos
para en ellos mirarme
como en el espejo
de tu alma
que siempre espero.
Dame la caricia
de tu espíritu
que en busca del mío
anda rondando.
Dame el infinito
para que contigo
mi amor con el tuyo
también se llene
de este amor
inacabado.
Susúrrame al oído
y sentiré el arrullo
en mi corazón
de la suavidad
de tu palabra.
De esa palabra
que cobra vida
al quedar atrapada
en los suspiros
míos.
Calvario, 18 de julio de 2025
Romero Salgado Pacha
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