El correr del viento
Escucha el viento
cuando pasa silbando
cuando duermes
y estás soñando.
Son los latidos del corazón
que con el viento corren
y que a ti me han traído
como ave volando.
Escucha el leve susurro
cuando llega a ti mi voz
es mi voz que te llama
que te suplica si me amas.
Que te lleva el viento,
ese aire que ahora respiras
cuando estás soñando
cuando tus ojos me miran.
Siento tus manos tibias
suaves sobre las mías
cómo me tiemblan
las dos entrelazadas.
Miro tus ojos que sostengo
y noto cuando yo los hablo
que con la mirada parpadean
y ellos me miran y me miran.
Abre tu pecho y acógeme
que llega mi espíritu
en forma de torbellino
para que a mi alma acojas.
Abrázame fuerte,
fuerte contra tu pecho
para que este amor mío
ese que llevo dentro
en el tuyo le acojas.
Para que no se escape
para que le mimes
y no se vaya con el viento
si pasar le dejas.
Yo entraré en tu cuerpo
en cada suspiro tuyo
y que al respirar soñando
de tu boca se te escapan
y yo atraparlos quisiera.
Cada latir de tu pecho
en cada abrazo tuyo
con los besos míos
en cada caricia tuya
quisiera hacerte mía.
Y en cada aliento
que late en tu alma
que como un soplo
atraviesa la mía.
Montt, 1, sept. 2025
Romero Salgado Pacha
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