Huele a otoño
Ay, mi alma como me duele
cómo suspira mi corazón
y yo sin verte, sin hablarte
y sin saber nada de ti.
Me ahogan los suspiros
que salen del alma
y no puedo apagarlos
sin sentirte lejana.
Ya huele a otoño
y me inspira la hoja caída
como los sueños
que cuando se olvidan
como la luz tuya.
Luz que me cautiva
y me pierde los sentidos
de tanto como pienso en ti
en las noches en vela.
Los recuerdos me atormentan
y me extasía con ellos
de noches de olvido
y días y sin final.
Necesito volver al pasado
para no olvidarme de ti
para seguir enamorado
y morirme mañana sin sentir
morirme entre tus brazos.
¿Es pecado el haberte amado?
¿Es ese sentimiento un pecado
que se mete en las entrañas
el de seguirte amando?
Una sonrisa dibujada
en el azul del cielo
es tu viva imagen
que me saluda alegre.
Desde la lejanía donde estás
pero el viento te empuja
la sonrisa con las nubes
te ha traído hasta mí.
Montt, 1, sep. 2025
Romero Salgado Pacha

No hay comentarios:
Publicar un comentario