Poemas en tránsito (XVI)
Para esa adorable chiquilla que tanto nos anima a seguir.
Por ese aliento que cada día nos ofrece para aumentar esa creatividad.
Por esa cuidada atención que tiene hacía todo lo que hacemos y sentimos.
Por ese cariño que demuestra y esa atención en cada escrito que observa y corrige.
Y esa atención de simpatía que nos ofrece con todo su corazón cada noche y cada día.
Para siempre Violeta.
Esta pena.
Esta pena clavada que llevo hoy,
Eres tu que has quedado prendida
como una furia
Esta pena que me arranca todo mi ser
es ese amor, es esa dicha, eres tu
que empujas y quieres quedarte
¡No sé! Si esa pena me arrancase
¿Dejaría que sufriera y alejaría de mí
esa pena?
¡No!
¡Quiero tenerla y curarla!
Con el frío se aprieta a mí,
me atenaza el cerebro
con músculos de acero,
y me absorbe el corazón.
El sueño me vence pensando en ti,
con mi pena dentro y,
me encierro contigo en tu celda de amor
al ver tu puerta abierta, y me quedo.
¡Qué tristeza, tristeza!
¡Ay qué dolor!
Sentir tus pasos recorrer mi mente,
sentir tu adiós, entre nubes de algodón.
Te he visto cruzar por mi frente y,
he sentido tus pasos dentro de mí.
¿O, tal vez, quizás no seas tú?
Pero..., yo te esperaré
a que llegues cerca de mi
para decirme quién eres
¿Qué es eso que yo siento?
Si eres el amor,
¡Ese!, ¡Sí, ese!
el que ha pasado,
en silencio.
Calvario, 20 de junio de 2021.
Romero Salgado Pacha.
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