sábado, 18 de febrero de 2023

1949. "Ciascuno è incalzato dalla sua provvidenza: Diari di guerra e di pace 1940-1949" (Cada uno es apremiado por su providencia: Diarios de guerra y paz 1940-1949) (Ensayo)

 Autor:
 Eugenio Corti 


Redactados por Eugenio Corti durante la Segunda Guerra Mundial e inmediatamente después, recogidos en diecisiete cuadernos conservados por su mujer Vanda y ahora propuestos en su totalidad, estos Diarios abarcan un período de tiempo que va del 18 de noviembre de 1940 al 22 de noviembre de 1949. terrible experiencia de un joven en guerra: los ideales al principio, el viaje interminable, el frente del Don, el martirio de la retirada y, después del 8 de septiembre, la huida al sur y la batalla junto a los Aliados para combatir a los alemanes en el frente del Adriático, y más tarde aún, los enfrentamientos políticos en la Italia "pacificada". 

Además, estos escritos contienen la génesis de su vocación de escritor y su maduración humana, el tránsito del idealismo juvenil a la seriedad del compromiso de quien es pasó por el fuego.Gracias a estos Diarios hasta ahora inéditos podemos conocer todos los detalles de ese itinerario espiritual: los sueños de un veinteañero que se enfrenta a la vida, la experiencia directa de la guerra, su primer taller de escritura Rostro privado: los miedos, las carácter ardiente e inflexible ante la injusticia, el asco por las atrocidades de que es capaz el hombre, la fe cristalina.

La experiencia "literaria" de la guerra, que es su lógica consecuencia, debutó espléndidamente en 1947 con Los más jamás regresan (Garzanti ), la primera memoria de la trágica retirada de Rusia, y en la obra maestra posterior, El caballo rojo (1983), encontró el crisol narrativo en el que verter una altísima síntesis entre la observación del horror, la mirada del alma y elatención al destino de cada hombre.

Italia, 1949
Ed. Ares
546 páginas

Rústica

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Poemario: "Dentro de mí"

  Dentro de mí El amor que late  dentro de mí  puede más  que la realidad:  No he visto a mi ángel  para que me arrope  con sus alas. Es tan...