Mi diosa alada
Yo soy tu rey gitano
y tú la reina de Saba,
mi reina adorada.
La sal que condimenta
el espíritu de mi vida
y le da alas.
Esa eres tú,
mi diosa alada,
la que más me ama.
Sí, esa eres tú
la que en sueños
me llama...
...y la que apacigua
la sed que me ahoga
y me trae la calma.
Eres la única mujer
que yo estaré queriendo
el resto de la vida.
Con el último suspiro
que agarrado a la vida
y que nunca se apaga.
Montt, 19, sep. 2024
Romero Salgado Pacha
No hay comentarios:
Publicar un comentario