Autor:
Theófilo Acedo García.
Revista "Puerta de Madrid"
2 hojas.
Nuestro amigo Theo nos cuenta que este artículo es más largo que el original, ya que tiene más de treinta años, lo ha reescrito varias veces y finalmente lo ha publicado en la revista, "en su revista", como él dice "Puerta de Madrid", de Alcalá de Henares.
Excelente artículo de nuestro amigo Theo. Al mencionar a ese poeta guadalupense, Nicolás Sánchez Prieto, que escribía tan bellos versos a la Virgen de Guadalupe, nos llega el recuerdo de cuando le conocimos. Fue en cierta ocasión que recitó en el Hogar Extremeño de Madrid allá en la lejanía de los años 80. Y fue de precisamente de la mano de otro amigo y compañero de trabajo, también guadalupense.
Era una persona de complexión fuerte, muy sociable y campechana, con esa amabilidad característica que denotan estos personajes. Tenía publicada varias obritas de poesía, todas o casi todas dedicadas a la patrona de Extremadura. Versos que calaban profundamente en todo aquel que los leía. Poemas cortos y sencillos con versos entrañables, suaves que palidecían el espíritu del lector.
Días más tarde me proporcionaría toda su bibliografía, quise pagarle, al menos por que a él no le fuera todo lo gratuito que habría querido, pero no aceptó nada, sólo me dio su agradecimiento por ese interés mío en tener su bibliografía. También nos hizo extensible su preocupación por no habernos proporcionado algunas de esas ediciones ya agotadas.
Sólo tuve esa corta amistad, breve, la de esa noche de viernes en el Hogar, posteriormente las noticias que me llegaban eran a través de mi amigo cuando yo quería saber en delación a sus publicaciones, así quedó patente su amistad y atento agradecimiento al afecto adquirido aquella noche. Tuvo ese reconocimiento, sí, de esa constante nuestra en adquirir todo aquello que oliera a Extremadura, bien publicaciones sobre temas o autores de la región.
Según nos contaba nuestro amigo y compañero, Manolo, era una excelente persona, muy amigo de tomar ese vino de la tierra, el vino tinto de pitarra, que quita las penas y alegra el alma. Por eso a sus versos, cuando los escribía, los resucitaba, le florecían ya creados muy dentro de sus entrañas. Poco tiempo después me diría mi amigo de su fallecimiento. Murió joven, no podemos saber con exactitud la edad que tendría, pero aún le quedaba mucho camino por recorrer.
Fuenla. 27 de septiembre de 2022
Alonso Pallares
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