La ruta de Don Quijote.
La Ruta del Quijote recorre las cinco provincias de la Región, con más de 2.000 elementos de interés cultural y una veintena de zonas de atractivo natural para visitar. Entre sus joyas culturales e históricas encontramos monumentos de gran interés como el Castillo de Almonacid de Toledo, el Castillo de Peñas Negras, los Molinos centenarios de Criptana, el Museo de Sara Montiel, el Museo del Vino en Pilón, el Museo Cervantino, la Cueva de Montesinos, el Castillo de Rochafrida, el Castillo de Montizón, el Corral de Comedias, el Castillo de Salvatierra…
De izquierda a derecha:
Alejandro García Galán y José Iglesias Benítez
Sentada: Mari Carmen Romero.
Lagunas de Ruidera, primavera de 1998.
Un paraje precioso con la belleza que transmiten una por una de sus lagunas que, para que no sean iguales se distinguen y se diferencian con distinto colorido. La variedad de sus aguas, con esa originalidad sorprendente cada una de ellas denotando esas características especiales, una forma de agradar la atenta mirada para quien en ese momento las contemplan.
Nuestro viaje fue breve, no daba de sí mucho dos días y entre la ida y la vuelta, el tiempo se acortó algo más. El recorrido no es muy largo, ya que desde Madrid se encuentra a tiro de piedra, nunca mejor dicho.
Este recorrido es una verdadera maravilla que nadie puede ubicar en La Mancha, las Lagunas de Ruidera son un verdadero paraíso de la naturaleza. Las mejores épocas para visitarlas son el otoño, la primavera y el invierno, aunque en verano también tienen su encanto.
Un grupo de amigos decidimos hacer una visita a estas Lagunas, todos ellos afines al Hogar Extremeño de Madrid y socios fundadores de la Asociación Cultural Beturia, entre los que se encontraba el poeta José Iglesias Benítez.
Fue una excursión de dos días, de un fin de semana corto, cuando el frío del invierno remitía por la irrupción presente de la primavera que comenzaba a vestirse de colores y adornarse con sus verdores las orillas de estas lagunas que aquí, en este cauce del río Guadiana, decidieron quedarse para siempre.
Más que de verdaderas lagunas, se trata de remansos motivados (según el modelo más extendido, entre otros) por grandes colapsos del cauce fluvial por fenómenos kársticos de una sucesión de dolinas conectadas separadas y relacionadas entre sí por barreras de formación tobácea, que forman cascadas y arroyuelos que enlazan cada una de estas lagunas con la siguiente inferior, salvando un desnivel de más de 140 metros para unos 18 km (laguna Blanca: cota 870 m; embalse de Peñarroya: cota 730 m).
Fuenlabrada, 20 de septiembre de 2022
Alonso Pallares
(BE-2367)
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