Autor:
Willy Zschietzchmann.
El origen de los estruscos es tan oscuro como oscura es buena parte de la herencia que nos han legado, rebelde a toda interpretación con demasiada frecuencia. Cierto que la ciencia, mediante el detenido estudios de los monumentos artísticos, las excavaciones y un trabajo metódico y minucioso ha acumulado en los últimos decenios un conjunto de conocimientos que no se poseían hace un siglo, cuando las únicas noticias de este pueblo se reducían a una que otra cita diseminada en obras de autores antiguos.
El arte romano hace su aparición en el momento en el que se agota la fuerza creadora del arte griego. Entendemos el arte romano el que floreció en la ciudad de Roma y su Imperio. Comprende, pues, todo el conjunto de obras que aparecieron a lo largo de la época en que los romanos impusieron su hegemonía al mundo.
En cuanto al primitivo arte romano, el correspondiente a la época en el que se fundó la ciudad y a periodos muy posteriores, tan poco es lo que sabemos que apenas si poseemos elementos para diferenciarlo del arte itálico o etrusco. En efecto no posee ninguna particularidad específica.
Bilbao, 1967.
Ed. Moretón.
188 páginas.
Traducción: A. Echevarría.
Ilustraciones en color y en blanco y negro.
Colección."Historia del Arte Universal", nº 6.
(Biblioteca de Divulgación Cultural)
Tapa dura.
12.5x16.5 cms.
Ejemplar adquirido en la ciudad madrileña de Parla, calle Pinto, en 2018.
Sin índice b.
50c.
(BG-5637)
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