A lo largo del valle del Vinalopó y su río (el cual da nombre a este emplazamiento del interior de la provincia de Alicante, convirtiéndose en principal testigo de la historia de esta zona alicantina), se extienden una serie de castillos y fortalezas, algunas de ellas de época almohade, que han jugado un papel clave en las poblaciones donde se ubican.
Hablamos de la Ruta de los Castillos del Vinalopó, un recorrido histórico y cultural por un total de 11 espacios que, durante el dominio musulmán, gran parte de la Edad Media y algunos siglos más tarde, fueron auténticas torres vigía para, principalmente, realizar un control militar ante el avance cristiano o la vigilancia de la frontera natural entre las coronas de Castilla y Aragón, si bien algunos de estos castillos eran también representación de ostentosidad o símbolos de poder.
Y es que no es casualidad que el citado valle sea poseedor de gran parte de los castillos más representativos de la provincia. Algunas de estas atalayas, que tienen su origen antes de la conquista de Jaume I, fueron levantadas entre los siglos X y XIII sobre posiciones estratégicas con el fin de dar protección defensiva a la población y mantener la dominación musulmana frente a una posible conquista cristiana, algo que, finalmente, fue llevado a cabo definitivamente en el s. XIII.
Hoy en día, ya desmilitarizadas y convertidas todas ellas en museos o espacios patrimoniales, estas fortalezas conectadas a lo largo de más de 100 kilómetros son una excusa perfecta para realizar una escapada por este valle de la Comunitat Valenciana.
Castellón de la Plana, s/n
Folleto ilustrado en color
Folleto ilustrado en color
Rústica
13.5x22 cms.
(B-318)
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