Poemas sueltos
(Primavera XVIII)
Tiempo de mieses (Poema)
Estos días de intenso calor,
que irradia de calima la sierra
y con noches de poco frescor
no se puede conciliar el sueño.
El verano se anuncia luminoso
y el cuerpo inundado de sudor
cuando se te ciega la vista
y pierden las ideas la memoria.
Furor bochornoso que se expande
esas ideas que se vuelven vanas
y pierde la memoria el sentido
del tiempo y las desganas.
Sin adornos en los acentos
en las notas que vas creando
en tu cuaderno de viaje,
con el corazón palpitando.
Ese olor a pasto quemado
del que llega ese dulce sueño
en la memoria de un sabor seco
como fuego temblando.
Tiempo de antaño lejano
cuando tu ser soñoliento fluía
en un mundo entonces extraño
y el verano aparecía.
esas mieses que se llevan
en las bestias cargando
en las mañanas frescas
hacinadas en las eras del campo.
Haces que se van colocando.
a veces el sol ha subido
se ve en el cielo a lo más alto
si el zagal se ha descuidado.
También se hacen viajes
de ida y vuelta y otra vuelta
para apurar rápido el trabajo
que aún queda todo el verano.
Es tiempo de recolección
de mieses del campo a las eras
en el aparejo de pinchos clavadas
para que después sean trilladas.
Y ese viaje último que el sol
cae tan cruel y despiadado
sobre ese otro viaje ha dado
y el sudor que baja por la frente.
Esa sequedad ardiente en la boca
la que a la piel se adhiere
y se empapa en las prendas
y corre como cuando llueve.
Arroyo Horcajuelo/ermita, 15, junio, 2022
Romero Salgado Pacha
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