Poema dedicado:
Para:
(Rogelio García Vázquez)
Del poemario:
"En esta lenta soledad del día"
Madrid, 1988.
Ed. Beturia.
Página, 44.
Autor:
José Iglesias Benítez.
Anochecer.
Está rota la luz. Y está tan rota
que ha teñido de sangre los rastrojos.
La luz muere deprisa. Entre manojos
de sombras que despiertan. Todo flota.
Esta rota la luz. Y está tan rota
que hieren sus cristales en los ojos.
Será que huelen siempre los despojos
de algo que se muere y nos derrota.
El alma se estremece en este instante
de luces y de sombras. De paz plena.
La luz tiene estertores de gigante.
La tarde se desploma con la pena
y reclama la luz agonizante
arrastrando sus colore por la arena.
(BE-1821)
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