(II-primavera)
Para ese Alma
color Violeta.
Oda a la Amada.
El corazón aún me palpita
Descubro el Alma despierta
Los sueños se fueron, soñar fácil
¿Los sueños, dónde están?
Te veo venir a través de mis ojos
tras de ellos pareces llegar
Es el espejo de tu Alma
donde veo el espíritu vagar
¡Necesito de ti!, te añoro,
¡te quiero y te imploro!,
ten compasión de este pobre
escanciado de sentimientos
y herido el corazón.
Ten piedad de este ciego
que te entrega cada día el Alma
lleva un zurrón de sueños, de amor
a cambio de nada, solo
apagar esta sed que me aprisiona.
(II)
Prisionero siempre de ti seré
errante por la vida voy caminando,
siguiendo tus pasos allí donde vas
e iremos hasta el fin del mundo,
¡Apaga esta sed que me embarga!
¡Que me asfixia y me ahoga!
¡Deja que toque tu Alma!
¡Tan siquiera!
¡Mi amor!
Tu felicidad será mi felicidad
No abandones a este desdichado
que la vida por ti daría
Es mi ofrenda que te ofrezco
con intensidad, día y noche.
Mírame con esos ojos tuyos,
esos ojos de miel y limón
que en mi renacen cada día
esa mirada tuya de niña mía
y me despierta cada mañana
...al salir el sol.
Verarzá, 16 de abril de 2021.
Romero Salgado-Pacha.
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