El altozano (III)
Cortejo del Caballero de la Mesa Cuadrada a sus damas: (III)
(Romance)
El Caballero de la Mesa Cuadrada
tras declararle al amor a la Dama Cautiva,
elige a tres bellas doncellas como sus damas.
y convoca a la toda la plebe
a una fiesta en honor de su compromiso.
Cada una lleva lindos vestidos que deslumbran
como luces son sus ojos que brillan con luz propia
y sus cabellos con destellos como brillantinas,
dibujando doradas filigranas.
Y todas sin igual dibujan una sonrisa,
todas han de llevar su cometido,
Es como un Relicario tras el cual todas
pasaron, sumisas y con devoción.
Son tres damas de damas preciosas
que la vida misma las ha creado,
todas llevan ese resplandor de damas,
de bellísimas princesas guapas y hermosas,
todas con ese encanto que irradian.
dibujando doradas filigranas.
Y todas sin igual dibujan una sonrisa,
todas han de llevar su cometido,
Es como un Relicario tras el cual todas
pasaron, sumisas y con devoción.
Son tres damas de damas preciosas
que la vida misma las ha creado,
todas llevan ese resplandor de damas,
de bellísimas princesas guapas y hermosas,
todas con ese encanto que irradian.
dos damas novicias tan hermosas como ellas
detrás de ellas les acompañaban.
Y sus pechos refulgen con gran valor
con ánimo y desenfado van todas,
con esas preciosas perlas que resaltan.
Delante camina la princesa, la Dama Cautiva
que destella sobre las otras tres damas,
por su diferencia, en altivez y encanto.
por su diferencia, en altivez y encanto.
El público se alza en sus asientos en delirios
de ese fastuoso desfile de altas princesas.
y un ¡oooh! surge de sus gargantas
en un estertor de bella estampa que deleita.
Todos aplauden cuando pasan
y el espacio del tiempo brillando queda.
y el espacio del tiempo brillando queda.
deteniéndose el tiempo en ese murmullo
que vanagloria a la plebe ensimismada.
Las corteja el Caballero de la Mesa Cuadrada
pero ellas parecen ausentes de esta y van dóciles,
sumisas, sus manos entrelazadas por delante
y el guerrero se le nota retraído y cabizbajo
y el guerrero se le nota retraído y cabizbajo
y va de suspiro en suspiro como embriagado.
Todos le aclaman sin distinción
por la gallardía y el buen porte.
El Caballero de la Mesa Cuadrada
sumiso ante las damas va caminando
con ensoñaciones y los ojos entornados
y no osa mirar a ninguna de las cuatro,
por ese pudor y honor hacía ellas guardado.
Las tres damas estaban en cautiverio
allá por varios condados del reino moro
allá por varios condados del reino moro
y que el Caballero con su ardor ha liberado,
pero la princesa ha querido llamarlas
para compartir la dicha con su amado.
pero la princesa ha querido llamarlas
para compartir la dicha con su amado.
Son sumisas, son gallardas, son altivas
son tres bellas damas de mucha confianza.
todas ellas esperando un buen caballero
guerreros valientes que la realeza les guardan.
Se las disputan, caballeros de alta estirpe
de los de la Mesa Redonda
y otros de los de la Mesa Cuadrada.
¿Quién será ese Caballero afortunado?
se preguntan todas ellas tan enamoradas del caballero
Si ha de ser este guerrero el pretendiente
tiene que aceptar las reglas del juego
que rigen dentro del reino al que ha llegado,
tiene que aceptar las reglas del juego
que rigen dentro del reino al que ha llegado,
y al que él mismo es el príncipe
el heredero de este trono.
¿Será el Caballero de la Mesa Cuadrada,
del que la princesa se ha enamorado?
¿O será el de la Mesa Redonda
que desde hace tiempo está al acecho?
Hay una discordia de ambos guerreros
que se rifan a la preciosa dama
la más hermosa que existe en su reino.
Ambos desde hace algún tiempo se la disputan
y han llegado a las armas
más de una vez en esta historia
sin llegar a ningún acuerdo.
Montearagón, 25 de enero de 2022.
Romero Salgado Pacha.
No hay comentarios:
Publicar un comentario