Las Cuatro Estaciones:
(Otoño LXXIII)
(A quien corresponda)
Dos almas unidas (Poema)
Déjame apoderarme de ti
posesionarme de tu cuerpo,
introducir mi alma en la tuya
y unificar cuerpo con cuerpo.
Quisiera sentir el hálito de tu mirada
y soñar de nuevo como penetro.
Me adentro en el corazón de tu alma,
como mi ser y tu ser se fusionan.
Eres como un río poderoso
que atraviesa mi garganta,
bebo el agua dulce de tu boca
y suspiro respirando por tu mirada.
Tu Mirada, ¡Ay, tu mirada!
es como un fuego que me quema
y por mucho que intento no se apaga.
Es como la brasa que, ardiendo,
siempre me calienta el alma,
es ¿Cómo diría yo?
es cómo dos galaxias unidas.
Son diamantes puros que brotan
en la mañana.
Fuenlabrada, 14 de abril de 2010.
Romero Salgado Paca.
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