Poemas en tránsito (XIII)
No te olvido, ni te olvidaré nunca.
Para siempre Violeta.
En un trance.
¿Oyes ese silencio que lejano suena?
Silencio como caído del cielo.
¡Sí! Adorna el poema y lo redondea.
y florece como un jardín en el edén.
¿Estás hablando o recitando?
¿Ves como los poemas llevan algo de ti?
¿Ves como me recitas al hablarme?
¡Si! Tiene sentido, vuelves a sonreír.
Estás pensando si te sale un poema.
¿Ahora? Es ahora que me empujas tú
Que me haces soltar el alma,
a suplicarte que nos miremos.
Y adormecerme en tus brazos
al arrullo de esa duce nana como tú sabes
cantarla a los niños como yo.
¡Daría!, ¡no se que daría,
por escucharla!
No sé que daría yo, por volverte a ver.
Por volver a acariciarte desde esos ojos
y besar esos labios tuyos. rojos,
ese dulzor del aliento de tu boca
II
Esa mirada tierna que me embelesa
y se me entra dentro, muy adentro.
dentro, tan dentro de mi alma
y estalla en mil pedazos.
muy dentro de mi corazón.
Lloraré amargamente, por que sé
que te irás. O que tal vez, no vuelvas.
No vuelvas más, sin haberte ido.
Tu pelo se enredó en mi pensamiento,
y has de volver por el.
Y entre nubes de humo al viento,
yo te diré al oído despacito,
¡te quiero, te amo!.
Y soñaré que estoy despierto.
y que esto no es ningún sueño.
Es como si té tuviera dentro de mi,
como si estuvieras junto a mí, a mi lado,
tocándome con los dedos de tu mano
Y siento el roce de tus labios
que, acarician los míos.
Me estás besando.
Presiento algo dentro de mí,
algo extraño.
Pero ¡no!, no estoy,
o ¿sí? soñando.
¿Estás aquí? ¡Sí!, junto a mi,
justo a mi lado.
Estamos en un trance del camino,
¿o es que estamos los dos soñando?
Calvario.8 de junio de 2021.
Romero Salgado Pacha.
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